Hoy
recorremos el tramo del Camino que discurre por los bellos parajes
del municipio de Monterroso. Pasamos por Ligonde, lugar lleno de
historia. Al llegar, el renombrado cruceiro, más allá el recuerdo
del antiguo hospital de época medieval y el cementerio de
peregrinos. Y, aún más allá, la iglesia de Santiago, con su
fachada románica, otro cruceiro, en el lugar de A Eirexe. Una fría
mañana de noviembre.
Cruceiro
de Ligonde.
Coordenadas
de situación de Monterroso en Galicia. Amplíe el mapa y llegará al
inicio de nuestro camino de hoy, Ligonde: 42.855042, -7.776608
Comenzamos
en el lugar en el que terminó nuestro capítulo anterior (Click Aquí para ver nuestro capítulo anterior).
A lo lejos apenas se distingue el cartel indicador de Lameiros.
Estamos a escasos metros del Cruceiro de Ligonde. Estamos justo aquí: 42.855042, -7.776608
El
cruceiro está en la curva, al fondo de la imagen. La mañana es
fría.
Según
leemos en la web del Concello de Monterroso (http://www.monterroso.es):
Está
datado en 1670 y es uno de los cruceiros más representativos, tanto
de Monterroso como de todo el Camino Francés. En su base y con claro
relieve se han esculpido un martillo, unas tenazas, una corona de
espinas y una calavera con huesos en representación de
la vida, pasión y muerte de Cristo. La cumbre culmina con la
crucifixión de Cristo en una cara y un relieve de la Virgen con
Cristo en brazos que muchos relacionan con la Virgen de los Dolores.
Vamos
a continuar el camino.
Dejamos
atrás el Cruceiro de Ligonde.
El
peregrino entra en el núcleo de casas de la aldea de Ligonde.
Llegamos
al antiguo cementerio
de peregrinos de Ligonde. Muy
cerca está el lugar en el que hubo un hospital para la atención a
los peregrinos. Estamos justo aquí: 42.859538, -7.780742
Seguimos
con la web del Concello de Monterroso:
La
pradera que hoy se conoce como Leira da Rúa fue en su día un lugar
sagrado donde descansaban cientos de peregrinos que habían sucumbido
al esfuerzo de recorrer el Camino de Santiago bajo las condiciones de
la época. Hoy en día solo se conserva la cruz que marcaba su
ubicación. Algunos vecinos dicen recordar épocas de grandes lluvias
que hacían que el agua que la pradera drenaba saliese con restos
óseos.
Seguimos
caminando y a menos de 100 metros del cementerio llegamos al lugar
donde vemos esta fuente, hay aquí un albergue. El Camino sigue por
la derecha.
Continuamos,
saliendo del núcleo de Ligonde volvemos al asfalto, por la pista de
la derecha.
Hemos
caminado apenas 150 metros y llegamos a otro albergue, antigua
escuela, a nuestra derecha. A la izquierda de la imagen, el Camino se
desvía y deja brevemente el asfalto, para salvar una curva de la
pista.
El
Camino se convierte en un estrecho sendero que desciende unos 100
metros para volver a la carretera.
Y
volvemos a la carretera.
Por
ahí hemos venido.
El
Camino avanza ahora en ligero ascenso.
Divisamos
a nuestra izquierda la iglesia de Santiago de Ligonde y el cementerio
que la rodea.
La
iglesia de Santiago de Ligonde está en el lugar de A Eirexe. Estamos
aquí: 42.864340, -7.786413
Este
panel informativo se refiere al Conjunto Histórico de A Eirexe.
Nos
acercamos a la iglesia. No podemos acceder al interior por lo que no
será posible ver el sarcófago medieval ni tampoco el sepulcro
prerrománico. En otra ocasión hemos de regresar.
La
fachada de la iglesia es la única parte de la época románica que
se conserva, dado que que se reconstruyó en el siglo XVII.
Volvemos
a la carretera para ver el cruceiro y continuar el caminar.
100
metros más adelante llegamos a A Eirexe, hay un bar y dos albergues,
y un cruce, seguimos por la carretera de la izquierda.
Ahora
vamos a recorrer unos 900 metros hasta el siguiente cruce de
carreteras.
El
Camino toma otra ver sentido ascendente en una larga recta que nos
llevará al mencionado cruce.
Junto
a la casa está el cruce o junto al cruce está la casa.
Llegamos
al cruce.
Estamos
aquí: 42.868364, -7.797786
Una
vez pasado el cruce el Camino continúa, ahora en descenso moderado
hacia el lugar de Portos, parroquia de Lestedo, ya en el término
municipal de Palas de Rei. Allí, en Portos, se iniciará nuestro
siguiente capítulo sobre el Camino. Una señal recuerda
oportunamente a los conductores la necesidad de respetar al
peregrino.
Fin.
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