Fervenza (Cascada) y Molinos de A Barosa, en Barro. Provincia de Pontevedra.

Estamos en el municipio de Barro y vamos a visitar un lugar único (como tantos en Galicia…): la colección de molinos, la mayoría restaurados, situados junto al río Barosa, que forma aquí una impresionante fervenza (cascada), por el fuerte desnivel del terreno. Hay dos rutas para pasear, piscina natural, área recreativa, restaurantes, Parque da Natureza. Volver.

Coordenadas de situación de Barro en Galicia. Amplíe el mapa y llegara a A Barosa: 42.555603, -8.631175

Al llegar al parque, al lado de amplias zonas de aparcamiento, nos detenemos ante este panel informativo. Estamos aquí: 42.554946, -8.632298

Miramos hacia el sendero que nos conducirá a donde está la cascada.

Recortamos un poco el panel informativo para explicar los pasos que vamos a ir dando. Partiendo de donde nos encontramos, punto señalado por la flecha de la izquierda, nos desplazaremos hasta la isla con los tres puentes.

Las aguas de la cascada han sido calmadas formando una piscina, que suponemos en los meses de verano estará muy concurrida. En ambos extremos de esta piscina el río continúa su marcha por dos partes, formando una isla, como veremos. Hay dos puentes para acceder a la isla y un tercero para pasar a la otra margen.

Como se ve en el panel, hay dos rutas, la ruta 1 es circular, sube por la parte izquierda. Nosotros llegaremos hasta el Muiño de Valerio, tras pasar el puente de San Breixo. La ruta 2 sube por la parte derecha y recorre los molinos restaurados hasta la parte alta, en la que el río empieza a ser cascada. Esta ruta es de ida y vuelta.

Después de este tocho informativo nos ponemos en marcha. Caminamos hacia la isla de los tres puentes.

Estos dos puentes sirven para saltar a la isla.

Vamos a subir al segundo de estos puentes.

Desde este puente, el río, ya manso, por la parte derecha. Asoman los molinos, un primer grupo, que se ha convertido en restaurante. Por ahí vamos a continuar.

Pero antes nos acercamos al borde del muro que forma esta piscina.

La cascada ofrece variadas estampas según la época del año, según las precipitaciones, claro está. Por esa razón conviene acercarse por aquí a menudo...

La isla referida desde el borde del muro, mirando hacia atrás. Hay una fuente, un molino, mesas y bancos… Más tarde volveremos.

Comenzamos por la ruta 2 del panel. Hay una pasarela de madera, que se ve a la izquierda, y llega hasta el grupo de molinos restaurante, en el centro de la imagen. También vemos la isla y el denominado Muiño de Abaixo, en la parte superior. El sendero se inicia aquí. Como se ve, en un corto espacio la inclinación del terreno es importante.

Nos desviamos del sendero principal para ver este molino, cuya puerta está abierta.

Pasamos al interior. Está casi a oscuras.

Flash.

Hemos “sustraído” esta exposición sobre las partes de un molino de cubo del folleto informativo que editan la Xunta de Galicia (Consellería de Medio Ambiente) y el Concello de Barro.

Salimos y vemos la cascada y el piso inferior del molino (denominado inferno), que es por donde pasa el agua del río.

El agua que corre de un molino al siguiente lo hace por una canalización como la que aquí se ve.

Volvemos al sendero principal, dejamos este molino atrás.

Caminamos hacia los dos siguientes de la imagen. Están cerrados. El sendero continúa por la derecha.

Nos fijamos en el primero de estos dos siguientes molinos.

Seguimos monte arriba para llegar a este otro... molino. Tiene la puerta abierta.

Interior.

La canalización del agua que sale del molino que acabamos de ver.

Cruzando la canalización para acercarnos al borde de la cascada.

Cruzamos la canalización y nos asomamos desde aquí. Los molinos quedan a nuestra izquierda.

Estamos casi en lo alto, en donde empieza a formarse la cascada por la inclinación del terreno.

Tenemos que volver a cruzar la canalización de piedra para volver al sendero.

En la parte posterior de este último molino. Estamos en la parte más alta, el río aun no es cascada. Acaba el sendero. Volvemos.

Estamos ahora otra vez en la isla. Aquí abajo hay otro… molino, a la derecha, con su correspondiente canalización para devolverle el agua al río.

Vamos a cruzar al otro lado para iniciar la ruta 1, como vimos en el panel informativo. La señal blanca y amarilla indica que por aquí pasa el sendero homologado PR G 105, que recorreremos en parte.

Antes de cruzar este puente, la canalización mencionada.

Una vez cruzado el puente...

En la parte superior de la imagen divisamos los molinos que hemos visto.

En esta parte también hay mesas para degustar las ricas viandas. Al fondo vemos los listones, a modo de escaleras, por donde sigue el sendero, ya en ascenso.

Continuaremos por los listones monte arriba, pero antes…

...nos acercamos a la cascada…

...para subir sobre el granito, de una forma algo inconsciente. Eso sí, por la parte que está seca...

Llegamos a la parte alta de la cascada.

En la parte superior de la imagen asoma el último de los molimos que hemos vista antes, cuando hemos subido por el otro lado.

Hemos vuelto a bajar al punto en el están los listones de madera y, después de un pronunciado ascenso, ya en el sendero, nos sentamos aquí.

Y seguimos subiendo para llegar a este otro banco.

Este otro grupo de molinos son los que hemos visto en el panel informativo que están situados más arriba, enfrente de los que ya hemos recorrido antes. Como se puede observar, estos pocos no han sido restaurados, aún...

Dejamos atrás el banco. Ahora el terreno va suavizándose y caminamos entre la espesa floresta.

Estamos llegando a la parte en la que el río Barosa discurre más plácidamente. Está detrás de la puerta.

Río arriba vemos el puente de San Breixo. Más allá está la zona en la que el río está en calma total. Allí encontraremos el Muiño de Valerio, también hay otro puente de madera. Y algunos patos.

El zoom de nuestra bendita Olympus VR 340 (gracias, mi querida amiga) nos acerca al mencionado puente.

Desde este mismo punto miramos río abajo. El río ya se pone algo bravo, a la derecha se ve una de las canalizaciones que tomaban el agua del río para llevarla al molino.

Estamos ya en la zona con el río en total calma. A la derecha vemos asomar el puente de San Breixo. Vamos girando la vista de derecha a izquierda para llegar a ver el puente de madera que hemos mencionado algo más arriba.

Estamos en el mes de octubre. Dos meses después, a finales de diciembre, volvemos a este extraordinario lugar y el invierno nos ofrece estas estampas. Nos recreamos un poco, pero es que...

Volvemos a ver la indicación del sendero homologado PR G 105.

Entre las ramas apenas distinguimos el puente y el Muiño de Valerio, hoy convertido en restaurante.

Nos desplazamos hasta el molino y ellos nos vienen a recibir, no de muy buena gana…

No podemos tomar un helado porque el local está cerrado. Nos despedimos de nuestros amigos y nos disponemos a concluir la visita aquí.

Fin.