El Museo Catedralicio está dividido en tres partes: la Capilla de Santa Catalina, el Claustro y la Sala Capitular. Capilla de Santa Catalina: Está situada junto a la nave lateral de la derecha vista desde la puerta principal. Es de estilo gótico (S. XIV) y se transformó totalmente en los Siglos XVII y XVIII. En la Capilla está guardado el Tesoro Catedralicio. Destacan el relicario denominado Copón de Coco, la imagen de la Virgen con el Niño “La Patrona”, el terno rojo completo del S. XVI, las ánforas de plata de los Santos Óleos, la Custodia Procesional de 1602, la figura de Santa Ana, la Virgen y el Niño de 1520, el Barco de San Telmo, los retablos barrocos, entre el valioso legado histórico que compone el Museo Catedralicio.