Hoy
visitamos la parroquia de Santiago de Ois, en el municipio coruñés
de Coirós, cerca de la capital de la provincia. Existen en Coirós
varias muestras del románico rural de Galicia, ya tardío en el caso
de Santiago de Ois, de la primera mitad del siglo XIII.
Coordenadas
de situación de Coirós
en
Galicia. Amplíe el mapa y llegará a la
Iglesia Románica de Santiago de Ois: 43.247421, -8.122860
Nota:
Los textos que figuran en cursiva han sido extraídos de la
Tesis Doctoral de Dª María del Pilar Carrillo Lista titulada: Arte
Románico en el Golfo Ártabro y el Oriente Coruñés. Capítulo 12:
Iglesias de tradición románica, pags. 766 a 770. Universidade de
Santiago de Compostela. Facultade de Xeografía e Historia.
Departamento de Historia da Arte. Santiago de Compostela, 2005.
Al
llegar al entorno de la iglesia nos fijamos en este cruceiro.
La
autora se refiere al citado capítulo 12 de su trabajo: Se
han incluido un número reducido de iglesias en las que, pese a lo
avanzado de su cronología, se encuentran elementos decorativos y
estructurales que hunden sus raíces en el románico, debido a la
pervivencia de este estilo en la Galicia rural más allá de 1200.
Las
iglesias de tradición románica siguieron manteniendo muchos
elementos arquitectónicos y ornamentales, pero el tratamiento que
reciben y la incorporación de otros góticos, producen un estilo de
transición caracterizado por el progresivo deterioro de los modelos
románicos, reinterpretados de manera tosca y simplista.
En
estos templos se encuentran elementos decorados, como capiteles y
basas que repiten motivos que se habían popularizado en las décadas
anteriores, pero que a fuerza de repetirlos fueron perdiendo
frescura.
El
resultado es un estilo tosco, de escasa calidad e imaginación, que
se va empobreciendo hasta sucumbir ante el avance de una nueva
estética, el gótico, más acorde con unos tiempos en los que el
desarrollo de las ciudades y las grandes obras que en ellas se
realizan, desempeñan un papel importante en la desintegración del
románico rural en el segundo cuarto del siglo XIII.
A
continuación unas breves pinceladas sobre la historia de la iglesia:
Santiago
de Ois es una parroquia del municipio de Coirós. La antigüedad de
este asentamiento quedó probada con la aparición de varios
sarcófagos altomedievales en el atrio de la iglesia.
Poco
se conoce de su historia en época medieval, aunque la presencia del
castillo de La Mota de Ois, que perteneció a los Andrade, es un
exponente del interés que debió de tener este término durante la
Edad Media. En 1471, esta fortaleza pasó por herencia a Pedro
Fernández de Andrade, que la recibió con los setenta vasallos que
conllevaba.
Apenas
se conocen documentos medievales referentes a esta iglesia, pero sí
una real cédula de
los Reyes Católicos, fechada en 1487, por la que ordenan al
presidente y oidores de la Audiencia de Galicia que les envíen el
proceso original del pleito entablado entre la ciudad de Betanzos y
Pedro Fernández de Andrade respecto a los "cotos de Oyes y
Oys", para que se vea en la Corte.
En
la fachada occidental se abre una puerta con un tímpano semicircular
liso, de grandes proporciones, que descansa en mochetas de nacela.
Que esté descentrado respecto a la puerta, junto con que el aparejo
de este muro es desigual y tiene múltiples engatillados son prueba
de haber sido reconstruido. En el centro, una hornacina alberga una
imagen pétrea actual del Apóstol Santiago,
patrón de esta parroquia.
Rematando
los extremos del imafronte se colocaron dos pináculos barrocos,
estilo al que también
pertenece la espadaña de dos vanos construida
en el piñón del muro.
Los
muros laterales de la nave están muy movidos y reconstruidos con
mampostería. Sólo
aparecen sillares formando las ventanas, que por fuera son saeteras.
Los
canecillos son de proa y de nacela simple o doble dispuestos a
distancias desiguales, lo que constituye una prueba más de que han
sido recolocados. Sobre las cobijas se ve una hilada de piedra que se
añadió en una reparación de la cubierta.
En
el lado sur aparece una puerta tapiada; es muy sencilla, y está
rematada por un tímpano semicircular.
En
el exterior del testero del ábside se abre una sencilla saetera, y
sobre el piñón se conserva una cruz antefija románica, colocada
encima de un sillar
rectangular sin decoración.
Al
lado sur
(del
ábside) cuatro
canecillos sostienen las cobijas del alero: tres son de proa y el
último se decora con una pequeña cabeza antropomorfa muy
deteriorada.
En
el testero de la nave aparece otra saetera y en el piñón una
antefija que descansa
en el lomo de un carnero. Se trata de una pieza cuadrada con varios
orificios circulares de distintos tamaños, dispuestos de forma
geométrica. La opinión más difundida es que se trata de un
fragmento de una ventana altomedieval, lo más probable es que sea de
una celosía procedente de una iglesia de estilo asturiano.
La
sacristía, añadida al muro norte con posterioridad a la
construcción del edificio original.
Muro
norte de la nave, como menciona la autora ha sido reconstruido con
mampostería.
Ventana
del muro norte, que por fuera es saetera. Destaca la autora que sólo
aparecen sillares formando las ventanas,
como puede verse.
Pasamos
al interior.
La
iglesia tiene una nave cubierta con techumbre de madera a dos aguas.
Ventana
del muro norte. La nave
está iluminada por medio de ventanas rematadas en arcos de medio
punto y abocinadas, que se abren sobre el arco triunfal, en los muros
laterales y encima de la puerta principal.
Al
entrar, a la derecha vemos las escaleras de subida al coro...
…y
a nuestra izquierda la pila bautismal.
Muro
sur.
Muro
norte.
En
el muro sur, el hueco con la imagen del Apóstol Santiago, que ocupa
el lugar de la puerta tapiada que hemos visto desde el exterior.
En
el muro norte.
El
ábside, de planta rectangular, con una bóveda de barrotillo
moderna. A él se adosó una sacristía en el lado norte, a la que se
accede por una puerta adintelada.
En
el testero del ábside se abre una ventana con arco de medio punto.
El
arco triunfal es de medio punto, doblado y de sección prismática.
La rosca mayor se apea en los muros a través de una imposta y la
menor sobre un par de semicolumnas adosadas.
Las
semicolumnas adosadas
se elevan sobre basas con los toros inferiores muy grandes y las
escocias están decoradas con pequeñas molduras dispuestas en
vertical a intervalos, formando casetones. Las garras están muy
deterioradas, y los plintos quedan bajo
el nivel del suelo, asomando apenas el del lado izquierdo.
Los
capiteles muestran diferencias tanto formales como decorativas. El
de la derecha presenta una decoración vegetal muy estilizada,
semejante a una palmeta en el centro, y en los vértices unas hojas
de talla muy plana de cuyos extremos penden pomas.
El
capitel septentrional
se adorna con hojas y tallos sin volumen ni modelado;
en los vértices apenas sobresalen unas hojas que rematan en pomas.
Sosteniendo
la mesa de piedra del altar, se sitúan tres fustes de columnas
monolíticos de unos 80 centímetros de altura que se encontraron
cuando se renovó el suelo de la iglesia.
Antes
de finalizar leemos atentamente las conclusiones de la autora
respecto a la datación de la iglesia:
La
iglesia de Santiago de Ois es un exponente del progresivo cambio
decorativo que se experimentó en las iglesias rurales de Galicia una
vez rebasado el paso del siglo XII al XIII. La pervivencia del
románico en este templo se manifiesta en la repetición de unos
modelos de capiteles y basas que se encuentran en edificios de fines
de la duodécima centuria. Santiago de Ois se encuentra, pues, entre
el grupo de iglesias que, pese a que son tardías, tienen mucho de
románico, y por su estilo podría fecharse
entre 1220-1230.
Ha
llegado la hora de poner fin a la visita a la Iglesia Románica de
Santiago de Ois, en Coirós, provincia de A Coruña.
Fin.
Hermosa nuestra Iglesia, no hay palabras para describir lo que el corazón siente al verla...
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