Hoy
estamos en Cangas de Morrazo, en la preciosa Ría de Aldán, al sur de
la provincia de Pontevedra. Seguimos con nuestro periplo por sus
playas y calas. En la margen izquierda de la ría, nos centramos en
las de Arneles, Pinténs, San Xián, Pipín y Castiñeiras,
separadas entre ellas por masas de rocas, que perfilan el fabuloso
paisaje de esta parte del sur de Galicia.
Paradisíacas
playas de Pipín y, al fondo, Castiñeiras.
Coordenadas
de situación de Cangas de Morrazo en Galicia. Amplíe el mapa y
llegará a la playa de Arneles, nuestro punto de inicio de hoy: 42.277545, -8.830870
Iniciamos
el recorrido de hoy con esta vista de Arneles, que asoma a la
izquierda, desde las rocas que la separan de la contigua de Testada,
donde terminó el anterior capítulo dedicado a algunas de las muchas
playas y calas de la Ría de Aldán, capítulo sobre las playas de Os
Picos, Vilariño y Testada (Click Aquí para ver este capítulo).
Estamos
ahora sí, ya en Arneles. Hemos accedido por la bajada principal. Hay
una pequeña tarima de madera y el palo de la bandera. Como hemos
indicado esta playa es la contigua de la de Testada y mide algo más
de 400 metros de longitud. A primera hora de la mañana, mes de
noviembre, aún
está amaneciendo. Estamos aquí: 42.277545, -8.830870
Regresamos
más tarde, a plena luz del día. Marea baja. La antigua fábrica de
la conservera Curbera se deja ver entre los eucaliptos.
Mirando
al lado contrario vemos, a lo lejos, eso sí, el casco urbano de
Aldán, el puerto y la playa de Os Picos.
Recorremos
la playa y al girarnos vemos la antigua conservera, edificio
abandonado, con sus correspondientes pintadas.
La
fábrica.
Llegando
al final de esta parte de la playa, las rocas y detrás, la playa de
Testada, como hemos indicado antes.
Vamos
a regresar al punto de acceso a la playa, en el otro extremo.
Ahora
nos desplazamos hasta la siguiente playa, Pinténs,
de
algo menos de 200 metros de longitud. Vamos a bajar a la arena. Es
otro día, con el cielo algo más encapotado por momentos. Estamos
aquí: 42.284162, -8.833908
Ya
sobre la arena caminamos hacia nuestra derecha para volver más tarde
hacia este lado.
Al
llegar a estas rocas, si caminamos sobre ellas unos 200 metro
llegaremos a la antigua fábrica Curbera.
Hemos
llegado al otro extremo de la playa.
Al
haber marea baja podemos ir caminando entre las rocas. Un poco más
allá hay una pequeña calita.
Pinténs.
La
pequeña calita.
Continuando
por esta parte el litoral es de naturaleza rocosa. Al otro lado está
el siguiente lugar al que nos dirigimos. La pequeña playa de San
Xián.
Antes
de dejar Pinténs vemos la playa de Menduíña, en la otra margen de
la Ría de Aldán (Click Aquí para ver nuestra visita a la playa de Menduíña).
Nos
dirigimos ahora hacia la siguiente playa a visitar, la de San
Xián. Tomamos
la carretera y
nos detenemos un instante en una de las curvas a contemplar las
vistas.
Desde
aquí vemos, en la otra margen de la ría, las playas de, de
izquierda a derecha, Menduíña, Francón y Area Cova (Click Aquí para ver nuestra visita a estas tres hermosas playas).
Estamos justo aquí: 42.285331, -8.838556
Menduíña.
Playas
de Francón y Area Cova. En la parte inferior de la imagen, parte de
la playa de San Xián.
Ahora
ya nos disponemos a bajar a San Xián. Tiene unos 170 metros de
longitud. Al lado, tras unas rocas, está Pipín, pequeña cala de
unos 90 metros. Más allá está Castiñeiras, 150 metros. Estamos
justo aquí: 42.285822, -8.836294
Una
vez sobre la arena, vista a la izquierda.
Vista
a la derecha, nos acercamos a estas rocas.
Caminamos
hacia el otro lado y encontramos este viejo tronco, que habrá visto
mucho.
Allá
quedan las rocas. Detrás de ellas, Pinténs.
Llegamos
al otro extremo.
Hay
que encaramarse a otra masa rocosa para pasar a la siguiente playa,
Pipín.
Rocas.
San
Xián.
Al
lado contrario aparece Pipín. Tras las siguientes rocas está
Castiñeiras.
La
recoleta cala de Pipín. Estamos justo aquí: 42.286985, -8.837577
Ría
de Aldán. Un piraguista del afamado Club de mar
Ría de Aldán está en pleno entrenamiento. Las bateas donde se
cultivan los bivalvos, representan una parte importante de los
recursos económicos de la zona.
Como
hay marea baja podemos pasar a Castiñeiras sin mojarnos los pies...
Otros
dos piraguistas surcan la ría.
Ahora
regresan, pasan, entre bateas, muy cerca de Menduíña.
Y
nosotros también hemos de regresar.
Fin.
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